Cidadãos ucranianos agradecem às tropas russas pelo cuidado que nunca lhes foi dado pelo exército ucraniano. [fonte:RT]

Acima, tropas russas acolhem prisioneiros em Auschwitz, Polônia (hoje pertencente à OTAN e com traços russófobos), ao fim da Segunda Guerra Mundial.

Una residente de Mariúpol relató que el Ejército ucraniano atemoriza a los civiles asegurando que los soldados rusos les dispararán si salen de sus refugios. ⬇️ Vídeo abajo.

#Mariúpol #Soldados

RT en español | RT última hora | RT a diario

Proposta Chinesa de Segurança Global

Xi Jinping presenta una iniciativa en el ámbito de la seguridad global: ¿de qué se trata?

Publicado: 21 abr 2022 12:34 GMT

Texto copiado na íntegra do portal RT.com, boicotado pela censura no Ocidente.

3 minutes


El presidente chino se expresó en contra de la mentalidad de la Guerra Fría, del hegemonismo, de la política de poder y de la confrontación de bloques.

El presidente de China, Xi Jinping, formuló este jueves su propia iniciativa en el ámbito de la seguridad internacional, en cuyo marco instó a rechazar la mentalidad de la Guerra Fría y abstenerse en la confrontación de bloques.

El mandatario indicó que la humanidad vive en “una comunidad de seguridad indivisible”.

“Se ha demostrado una y otra vez que la mentalidad de la Guerra Fría solo destruiría el marco de la paz global, que el hegemonismo y la política de poder solo pondría en peligro la paz mundial y que la confrontación de bloques solo exacerbaría los desafíos de seguridad en el siglo XXI“, destacó.

Según la visión de la seguridad internacional del presidente chino, es importante:

  • Seguir comprometidos con el concepto de la seguridad “común, amplia, cooperativa y sostenible”, así como trabajar para mantener la paz y la seguridad en el mundo
  • Respetar la soberanía y la integridad territorial de todos los países y no interferir en sus asuntos internos
El presidente chino, Xi Jinping
  • Cumplir con los “objetivos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, rechazar la mentalidad de la Guerra Fría, oponerse al unilateralismo y decir ‘no’ a la política de los grupos y enfrentamiento entre bloques”
  • Tomar en serio las “preocupaciones de seguridad legitimas de todos los países”, respetar el principio de la seguridad indivisible, crear una arquitectura de seguridad efectiva y equilibrada y oponerse a intentos de lograr la seguridad de una nación a expensas de la seguridad de otro país
  • Resolver las disputas entre las naciones de manera pacífica, a través de diálogos y consultas, rechazar el doble rasero y oponerse al uso de las sanciones unilaterales
  • Mantener la seguridad “en dominios tradicionales y no tradicionales” y “trabajar juntos en disputas regionales y desafíos globales, como el terrorismo, el cambio climático, la ciberseguridad y la bioseguridad”

“Los países de todo el mundo son como pasajeros a bordo del mismo barco que comparten el mismo destino. Para que el barco supere la tormenta y navegue hacia un futuro brillante, todos los pasajeros deben trabajar juntos. La idea de arrojar a alguno por la borda simplemente no es aceptable“, subrayó el mandatario chino.

“Tanques ucranianos disparaban a los civiles”: Emergen testimonios de los sótanos de Mariúpol a medida que se libera la ciudad”

ATENÇÃO – ESTE TEXTO ESTÁ SENDO COPIADO EM SUA ÍNTEGRA E TEM POR OBJETIVO MINIMIZAR A CENSURA AO SITE RT.com EM TODO O OCIDENTE. Link para acesso a esta publicação será enviado ao site original. NÃO À CENSURA DA MÍDIA RUSSA! O LEITOR DEVE TER AO SEU ALCANCE O CONTRADITÓRIO PARA QUE POSSA FAZER SEU…

“Tanques ucranianos disparaban a los civiles”: Emergen testimonios de los sótanos de Mariúpol a medida que se libera la ciudad”

“Tanques ucranianos disparaban a los civiles”: Emergen testimonios de los sótanos de Mariúpol a medida que se libera la ciudad”

⚠️ ATENÇÃO – ESTE TEXTO ESTÁ SENDO COPIADO EM SUA ÍNTEGRA E TEM POR OBJETIVO MINIMIZAR A CENSURA AO SITE RT.com EM TODO O OCIDENTE. Link para acesso a esta publicação será enviado ao site original. NÃO À CENSURA DA MÍDIA RUSSA! O LEITOR DEVE TER AO SEU ALCANCE O CONTRADITÓRIO PARA QUE POSSA FAZER SEU PRÓPRIO JUÍZO.⚠️

Publicado: 28 mar 2022 19:56 GMT

La ciudad, del sur de Ucrania, ha sido escenario de batallas encarnizadas entre las fuerzas rusas y nacionalistas ucranianos.

nullImagen satelital de uno de los barrios residenciales de Mariúpol (Ucrania), divulgada el 22 de marzo de 2022.Foto: 2022 Maxar Technologies / AFP

Mariúpol es escenario de enfrentamientos muy intensos entre las fuerzas rusas, que luchan junto las milicias de Donbass, y el Ejército de Ucrania, que tiene al lado los batallones nacionalistas.

En la ciudad, el 90 % de las viviendas se han visto afectadas y decenas de miles de residentes han sido utilizados como escudo humano por las cercadas tropas ucranianas.

Con las fuerzas rusas apretando el cerco, los residentes locales consiguen salir de los sótanos de los edificios. Junto a ellos, también salen a la luz las historias sobre lo que pasó en la ciudad asediada.

El Ministerio de Defensa de Rusia publica imágenes de helicópteros militares que realizan tareas de apoyo durante el operativo en Ucrania

“Ya no podíamos escondernos en el piso y corrimos al sótano. Nos escondimos en el sótano, y no tuvo ningún efecto el hecho de escondernos allí. Todo el edificio estaba temblando”, contó un residente local.

“Cerca de un jardín de infancia, donde había una tienda, ellos [los combatientes] colocaron morteros, cañones y dispararon contra un edificio. Anteayer, un tanque pasó por allí y disparó fuego directo a los edificios, ¡fuego directo!”, continuó.

Otra residente relató que los militares ucranianos no les ofrecían víveres ni la posibilidad de evacuar.

“No tenemos pan, ni agua, ni electricidad, ni calefacción, ni nada. Todos tosemos. Todo está mal. No recibimos ayuda de nadie desde hace un mes. Ni pan, ni agua. Para conseguir agua tenemos que correr bajo las balas”, afirmó la mujer.

Una ciudadana arriesgó su vida junto a 17 personas para escapar de los bombardeos.

“Fueron nuestros defensores los que nos bombardearon, el batallón ‘Azov’. Decidimos huir de allí porque nos dimos cuenta de que si pasábamos una noche más, simplemente moriríamos. Corrimos a través de la plaza hacia un refugio antibombas para, al menos, tomar un descanso después del bombardeo. Los tanques ucranianos circulaban y disparaban a los civiles, y los francotiradores también los atacaban”.

La mujer dijo haber pasado un mes en un refugio antibombas sin comida ni agua: “[Pedimos] agua, comida, teníamos niños pequeños… Y como respuesta recibimos proyectiles cerca de nuestro refugio”.

Otra habitante relató cómo intentó salir de la zona de guerra junto con su familia. “Empezamos a salir en un convoy de dos coches. Los dos primeros coches, el nuestro y otro, fueron tiroteados por francotiradores sin previo aviso, desde un hotel, alcanzando a mi hija tangencialmente. A mi madre le dispararon en las dos piernas, y a mi hijo menor también le dispararon en la pierna tangencialmente”, contó.

Otra mujer, de edad avanzada, señaló: “No hay medicinas. La gente está enterrada aquí, en el patio. Aquí tenemos gente enterrada, en el otro lado también”.

Tal vez, para alejarse de la devastación de alrededor, un hombre sentado en el patio lee serenamente un libro. “Mi escritor favorito, Valentín Pikul”, contesta cuando se le pregunta qué autor lee.

“10 días de vida así, ya estoy harto de todo. Estos disparos ya no me provocan ninguna reacción, créeme”, afirma cuando el corresponsal le dice: “Es usted un hombre de hierro”.

  • El pasado 24 de febrero, Rusia lanzó una operación militar especial para “desmilitarizar y desnazificar” Ucrania y poner fin a los acosos y al genocidio de la población de Donbass alentados por Kiev. 
  • Mientras tanto, los países occidentales continúan suministrando a diario armas a Ucrania para que haga frente al operativo militar de Moscú.

© Organización Autónoma sin Fines de Lucro “TV-Novosti” 2005-2022. Todos los derechos reservados

Parto de uma Nova Era

Roberto Amaral, Cientista político e ex-ministro da Ciência e Tecnologia entre 2003 e 2004

O que está em jogo não é a “soberania ofendida” da Ucrânia, “mas o doloroso parto de uma nova ordem mundial”, avalia o colunista Roberto Amaral
A débâcle da União Soviética – simbolizando a vitória do capitalismo sobre as experiências do “socialismo real” –, deveria haver ensejado tanto o fim da Guerra Fria quanto a dissolução da OTAN, em face do esvaziamento do objetivo comum: o combate à “ameaça” comunista. Não foi, porém, o que se viu, quando a URSS, em 1991, não só renunciava, unilateralmente, ao comunismo, como se decompunha perdendo de saída, com a independência de várias de suas repúblicas, cerca de 40% de seu território. A antiga “sede do mal”, agora capitalista – porém um país capitalista pobre e exangue –, se oferecia ao Ocidente, que, vitorioso, tonitruava o fim da história. Soberbo, fez menoscabo da adesão do adversário derrotado. Reinava, desde Carter, a doutrina Brzezinski, que via a Eurásia, independentemente de sua quadra política, como um possível obstáculo ao domínio global dos EUA, que queriam incontestável, seja pelo adversário ideológico da Guerra Fria, seja por outra potência econômica capitalista que viesse a emergir.  Em 1991, no governo de George H.W. Bush, a “Orientação de política de defesa”, referindo-se ao mundo que se sucedia à queda do bloco comunista, afirmava que a prioridade estratégica dos EUA (isto é, da guerra), era impedir, no futuro, o surgimento de qualquer corrente global potencialmente ameaçadora da liderança de Washington. Paul Wolfowitz, subsecretário de Defesa, seu principal redator, esclarecia as preocupações do Pentágono, posto que a Rússia, mesmo capitalista e fragilizada, “continuaria sendo a potência militar mais forte da Eurásia”. Potência que, hoje, permanece como o segundo exército do mundo, dispondo, ademais, do maior acervo de ogivas nucleares do planeta, e se candidata à liderança de uma nova ordem mundial resultante do encontro da decadência do Império com a emergência da China como potência econômica, política e militar.
Impunha-se, então, nada obstante a opção pelo capitalismo, a tarefa de desconstituir a Rússia ou, no mínimo, mantê-la sitiada. Essa política continha o antigo império e fragilizava a estratégia chinesa, anulando a potência de seu principal aliado militar.
A estratégia dos EUA, vitoriosamente levada a cabo, consistiu em atrair  para a órbita ocidental (ou seja, da OTAN), sob seu comando, os Estados que compunham o antigo Leste Europeu. Em 1999, se incorporam à organização militar a República Tcheca (já desmembrada a Tchecoslováquia), a Hungria e a Polônia. Em 2004 é a vez da Bulgária, da Estônia, da Letônia, da Lituânia, da Romênia, da Eslováquia e da Eslovênia. Em 2009 ingressam Albânia e Croácia; em 2017 Montenegro e em 2020 a Macedônia do Norte. Essa politica de balcanização já destruíra a Iugoslávia, mediante guerra sangrenta, de que resultou seu despedaçamento em pequenos enclaves. O mesmo processo seria mais tarde levado a cabo no Iraque e no Afeganistão. Com a “Primavera árabe” chegaria à Tunísia, à Líbia, ao Egito e à Síria, ainda em guerra intestina.
Moscou estava destinada à asfixia. 
Para os objetivos dos EUA, portanto, a absorção da Ucrânia pela OTAN é o coroamento de uma política de expansão militar bem sucedida; para Moscou, impedi-la transforma-se em um imperativo de sobrevivência. A violência da invasão é seu desdobramento.
O “Comunicado Final da reunião de chefes de Estado e de governo da OTAN”, realizada em Bruxelas em 14 de junho de 2021, confirmava oficialmente que Bósnia-Herzegovina (fruto da destruição da Iugoslávia), Geórgia e Ucrânia aspiravam a se tornarem membros da Organização. O documento, em sua essência, deixava claro que antes e depois da debacle, antes e depois da adesão ao capitalismo, antes e depois de seu desastre econômico, antes e depois de Bóris Yeltsin, antes e depois de seu soerguimento sob Vladimir Putin, a Rússia fôra sempre uma obsessão para os estrategistas do Pentágono. Na última operação, preparatória da crise desses dias, os EUA haviam promovido o golpe de Estado na Ucrânia (2014) que derrubou o presidente constitucional Viktor Yanukovych, abrindo caminho para a ascensão de governos hostis à Rússia e às minorias russas, atacadas pelo exército ucraniano e milícias nazifascistas. O novo governo, um títere pró-EUA, transformou o projeto de adesão à OTAN em mandamento constitucional. Na sequência do golpe, em 2019, o Parlamento ucraniano modifica a Constituição para, já no preâmbulo, reafirmar a “identidade europeia do povo ucraniano e a irreversibilidade do curso europeu e euro-atlântico da Ucrânia”. Mas a declaração de guerra viria no parágrafo 5º do artigo 8º ao incumbir ao Parlamento o dever de implementar “o curso estratégico do Estado rumo à plena adesão da Ucrânia à União Europeia e à Organização do Tratado do Atlântico Norte”.
Tratando-se de sua sobrevivência, Moscou não estabeleceu limites, e a resposta ao que considera ameaça à sua soberania foi a invasão; o fracasso da diplomacia impôs a guerra, na qual todos estamos envolvidos, fundamentalmente em suas perdas, porque toda guerra é uma tragédia.
Como observou Aldo Fornazieri (“Uma guerra do século XX”, Carta Capital, 9/03/2022), “Antes da invasão da Ucrânia, a Rússia tinha a vantagem moral, pois suas demandas eram e ainda são legítimas. Mas ao agredir injustificadamente, colocou a vantagem moral na boca de líderes ocidentais que têm as mãos sujas de sangue”. Ocorre, porém, que a vantagem moral da Rússia jamais foi considerada pelos EUA e seus servidores.
Putin, embora reconhecido como bom jogador de xadrez, parece haver subestimado a resistência dos ucranianos e ignorado a capacidade do Ocidente de impor sanções. A Rússia enfrenta um isolamento que mesmo a URSS jamais conheceu. E de bandeja entrega aos EUA bandeiras que sempre pertenceram à Esquerda, como a defesa da autodeterminação dos povos, da paz e da negociação como instrumento de solução dos conflitos.
EUA e União Europeia, enquanto os embates se desenrolam na Ucrânia, estão massacrando os civis do Iêmen, armando a Arábia Saudita e os Emirados Árabes Unidos. Mas isso não faz sangrar os corações piedosos: os iemenitas são apenas árabes, não têm cabelos loiros nem olhos azuis.
Sob o pretexto da guerra, a pauta internacional anuncia mais exércitos, mais armas e mais conflitos. Sob os aplausos da UE, a Alemanha de Olaf Scholz promete um reforço de 100 bilhões de euros nos investimentos militares, a elevação do orçamento do exército de 1,5% para 2% do PIB,  ao tempo em que anuncia um programa de exportação de armas. Em festa o complexo industrial militar. A periferia que se cuide. 
Para alguns analistas, Moscou caiu em uma armadilha dos americanos. Se vero, terá sido a segunda vez, pois antes tropeçara na malsucedida intervenção militar no Afeganistão, uma guerra que começou perdida, enquanto a CIA, sob as ordens de Jimmy Carter, fortalecia as organizações terroristas que nos anos seguintes iriam ensanguentar metade do mundo. Zbigniew Brzezinski, o estrategista da Casa Branca, perguntado se não se havia arrependido de haver armado o terrorismo que ousara o 11 de novembro, respondeu dizendo que a destruição da URSS era a grande compensação. Para todos os efeitos, aos olhos do Império ora declinante, a Rússia é a sucessora da URSS.
A batalha da Ucrânia tem todos os ingredientes para se transformar em um estorvo mundial, posto que o que menos pesa é a integridade de seu território ou o direito de seu povo à autodeterminação. O que está em jogo corre por fora de seus interesses. Nesta briga, a Ucrânia (apesar de invadida e em guerra), não exerce o papel de sujeito. O que está em jogo não é sua soberania ofendida, mas o doloroso parto de uma nova ordem mundial; um jogo de poder, vital para as potências envolvidas, as quais, numa disputa de vida e de morte, de sobrevivência ou extinção, não conhecerão limites. Os EUA podem chegar ao final dessa guerra que alimentam sem a perda de um só homem: em seu nome morrem civis e militares ucranianos. O que está em disputa, e é pelo que velam os norte-americanos e a Europa submissa, é a definição da nova ordem mundial, pois vivemos os últimos tempos da hegemonia anglo-saxã, reinante desde pelo menos 1815, superada pela emergência da Eurásia. Trata-se do doloroso parto de uma nova hegemonia, que põe em xeque a decadência do Império ante a emergência da China; trata-se do possível trânsito do poder do Ocidente para o Oriente, do Atlântico para o Pacifico.  
A História não conhece transição pacífica de poder, e a disputa da história presente comporta todas as hipóteses de desfecho. Descartada a eventualidade de uma vitória esmagadora de um dos lados, tanto podemos caminhar para um limitado acordo de paz, que será mero interregno antes do próximo embate, quanto podemos caminhar para uma escalada de conflitos levando a economia mundial a uma crise sem precedentes, anunciadora de inflação e depressão – o que, sabidamente, é mais um elemento alimentador da guerra.
Este raciocínio não considera a ameaça do suicídio atômico.
Há um óbvio jogo. Aos EUA, em face do progressivo crescimento da China, é mais conveniente antecipar o desfecho. E, quando põe em risco a sobrevivência da Rússia, parceira fundamental de Beijing, Washington está mirando a China, seu verdadeiro adversário. Para a China a guerra é indesejável, pois espera ascender ao pódio conduzida pelo processo histórico que vê a seu favor.
Se sobreviver um mínimo de bom senso, os senhores da história presente evitarão vitórias (e derrotas) esmagadoras, e assim, darão mais tempo de vida à humanidade. 

A Omissão Fatal de Bolsonaro

Texto de Celso Rocha de Barros:

A CPI da Pandemia, que se aproxima de seu fim, provou a ocorrência do maior crime da história republicana brasileira. Encontrou os documentos certos, fez as contas certas e descobriu o CPF dos culpados.

A CPI provou, com documentos, que Jair Bolsonaro se recusou a comprar as vacinas oferecidas pela Pfizer e pelo Instituto Butantan, e que só comprou metade da oferta do consórcio Covax Facility.

Tudo documentado.

Com esse número de vacinas não compradas e os documentos que provam as datas em que elas poderiam estar disponíveis, os cientistas foram trabalhar. Eles sabem o quanto o número de mortes costuma cair conforme a vacinação progride.

Na conta do epidemiologista Pedro Hallal, feita a pedido da Folha, só as vacinas da Pfizer e do Butantan teriam salvado cerca de 90 mil pessoas. Bolsonaro matou essa gente só com duas decisões.

Por sua vez, o jornal O Estado de S. Paulo calculou que, só com as vacinas recusadas do Butantan, todos os idosos brasileiros teriam sido imunizados com duas doses até o fim de fevereiro, estando, portanto, todos imunizados a partir do meio de março. Entre o meio de março e o momento em que a reportagem foi publicada (27 de maio), 89 mil idosos morreram de Covid. Supondo que a mortalidade pós-vacinação de idosos fosse igual à do Chile (20% dos doentes), Bolsonaro matou, com uma única decisão, cerca de 70 mil idosos só entre o meio de março e maio deste ano.

Todas essas contas, que ainda não usam os números de vacinas que Bolsonaro se recusou a comprar do consórcio Covax Facility, foram apresentadas à CPI. O Ministério da Saúde tem gente que saberia refutá-las, se elas estivessem erradas. Ninguém se pronunciou.

A CPI também descobriu o que Bolsonaro estava fazendo em vez de comprar vacina: mandando os trabalhadores brasileiros para a rua para adoecer, mentindo que haveria remédio caso eles ficassem doentes.

A CPI documentou a existência de um gabinete paralelo de médicos estelionatários que, por dizerem o que Bolsonaro queria ouvir, tornaram-se mais influentes do que os técnicos do Ministério da Saúde. Foram eles que promoveram os tratamentos com remédios como a cloroquina, muito depois da ciência ter demonstrado que eles eram ineficazes.

Mais recentemente, veio à luz o caso da Prevent Senior, que executou experimentos em pacientes inocentes com o protocolo bolsonarista de cloroquina e similares. O tratamento fracassou, os pacientes morreram, mas os dados foram falsificados para que não se soubesse que os pacientes haviam morrido de Covid.

Finalmente, a CPI descobriu que o governo Bolsonaro se esforçou para que uma, e só uma, vacina específica fosse aprovada: a Covaxin, que ofereceu suborno à turma do deputado Ricardo Barros (PP-PR), líder do governo Bolsonaro na Câmara. O negócio foi denunciado antes de ser efetivado, mas não por iniciativa de Bolsonaro.

Em resumo, a CPI provou que Bolsonaro matou mais de cem mil brasileiros, mentiu para eles que haveria remédio caso adoecessem, e acobertou gente de seu governo que tentava roubar dinheiro de vacina.

As revelações da CPI terão algum efeito político? Tem gente poderosa trabalhando para que não. Mas as provas que a CPI recolheu não vão embora. Ficarão lá, à espera de um Brasil que volte a ter instituições que não se vendam nem tenham medo do próprio Exército.

Este texto é de Celso Costa de Barros e não foi editado.

Looping II – Memórias de uma segunda-feira vermelha, quente e doce

Einstein tinha muita razão quando disse que uma hora com a pessoa amada poderia parecer um segundo. Ainda mais se a intensidade dessa pessoa for elevada à décima potência.Há um ano desejando, sonhando, idealizando o momento desse encontro. Imaginando cenas, palavras, toques…Somente quando acontece é que temos noção da dimensão do que realmente existe: o […]

Looping II – Memórias de uma segunda-feira vermelha, quente e doce